Reflexología
Estimulando la buena salud
Definición
Mediante la inserción de finas agujas en puntos específicos resonadores de cada meridiano se equilibra la energía en el órgano que lo rige.
Reflexología o terapia zonal es la práctica de estimular puntos reflejos sobre los pies, manos, nariz, iris, orejas… Aunque actualmente solemos diferenciar entre Reflexología podal, manual, Iridiología, Auriculoterapia, etc.
La reflexoterapia es una técnica que tiene como objetivo estimular un punto específico para desencadenar un reflejo favorable en su zona correspondiente. Su acción se basa en el arco reflejo musculo-cutáneo-visceral.
El estímulo reflejo creado al presionar o estimular los diferentes puntos reflexológicos, hace que el impulso generado sea transmitido toda velocidad a lo largo de las fibras nerviosas hasta la médula espinal. Los neurotransmisores (fabricados y almacenados en pequeñas vesículas propias de las células nerviosas), son los responsables de trasmitir este impulso nervioso. De ta manera que los receptores nerviosos sensitivos son los primeros que reciben el estímulo. Hay varios tipos de receptores, unos especializados en determinado tipo de estímulo como presión, temperatura y tacto, y otros (cuyas terminaciones son libres y pueden incluso ramificarse) que perciben el dolor.
El pie tiene 7.200 terminaciones nerviosas (está altamente inervado, por lo que es un área muy sensible). La presión sobre un punto reflejo, manifiesta un impulso nervioso que induce reacciones fisiológicas, involuntarias e inconscientes en los órganos y tejidos, restaurando así su propio equilibrio. Esta es la razón por la cual la reflexología se considera un método de reajuste que permite la auto-sanación del organismo.
Podemos decir que el propósito de la reflexología es armonizar y equilibrar las alteraciones en el organismo, pues lo mantiene en un estado óptimo utilizando así su propia inteligencia intrínseca.
Existen varios tipos herramientas que apoyan el masaje o las presiones realizadas con los dedos, generalmente son utilizados en la reflexología más asiática, y nos permiten profundizar en el tejido sin que nuestras articulaciones se vean afectadas, evitando así el cansancio o la lesión. Se fabrican normalmente con puntas redondas y de diferentes espesores, también existen palos con puntas planas que reemplazan el movimiento de arrastre, o rodillos y palos de punta bi-determinada, o en tres puntas con diferentes grosores y tamaños. Pueden estar hechos de madera, cristal o piedras semipreciosas como cuarzo u obsidiana, en cuerno de búfalo (la llamada Gua Sha) y cerámica.
Un poco de historia
La reflexología es una práctica ancestral utilizada en muchas y diferentes culturas antiguas. Hay evidencias encontradas en jeroglíficos Egipcios que muestran como la reflexología era una técnica utilizada por su cultura. También se encuentran pruebas antiguas en el continente asiático, China, India, Japón, y en América como por ejemplo en la cultura de los indios Cherokee.
El Dr. William Fitzgerald es considerado el padre fundador de Zone Therapy en Occidente, definió la reflexología tal como la conocemos hoy. En 1913 descubrió que la presión ejercida sobre partes específicas del pie causaba anestesia en ciertas partes del cuerpo. Esta investigación lo llevó a formular la división del cuerpo en diez zonas de energía, iguales y longitudinales, cinco correspondientes a la mitad derecha del cuerpo y cinco a la parte izquierda. Cualquier área del cuerpo ubicada en estas líneas longitudinales se indica en la zona de terapia de gráficos.
El doctor William Fitzgerald, junto con el Dr. E. F. Browers publicaron el libro registrado mas antiguo de reflexología, titulado Zone Therapie.
Después es Dr. Joseph Shelby Riley desarrolla los diagramas, detalla los dibujos y localiza las áreas y puntos reflejos.
Pero es Eunice Ingham una masajista americana, la creadora de la Reflexología tal y como la conocemos hoy día, convirtiéndose así en la madre de la Reflexología moderna. Gracias a su extensa investigación, pudo unir la estructura anatómica del cuerpo con las zonas de energía en los pies y descubrió que los pies proporcionaban un reflejo de todo el cuerpo.
Beneficios
La reflexología está especialmente indicada para trastornos funcionales: como el manejo del estrés, dolor de espalda, trastornos digestivos, migrañas, trastornos del sueño, sinusitis, dolor menstrual, trastorno urinario, dolor en las articulaciones…
- Aporta relajación profunda también a nivel muscular.
- Energetiza el organismo o revitaliza la energía.
- Armoniza funciones vitales.
- Reduce el estrés y libera la tensión nerviosa.
- Alivia la tensión corporal y el dolor.
- Mejora la circulación sanguínea y activa el sistema linfático.
- Promueve la eliminación de toxinas.
- Equilibra los diferentes sistemas (circulatorio, digestivo, endocrino, inmunológico, circulatorio, respiratorio, etc.).
- Sirve como medicina preventiva.
- Es gratificante para quienes lo practican y para quienes lo reciben.
- Facilita la obtención de energía vital.
- Relaja el sistema nervioso y por consecuencia la mente.
- Regula la circulación sanguínea, linfática y energética.
- Ayuda a mejorar las funciones específicas de cada órgano.
- Re-equilibra la energía y la salud en general.